La abogada Viviana Maravanki explicó que su cliente no ingresará al barrio donde ocurrieron los hechos hasta que pase un poco mas de tiempo. Además, aclaró que la pistola utilizada no era de él, sino que pertenecía a los delincuentes que intentaron asaltarlo.
Ochoa le arrebató la pistola a uno de los ladrones y disparó al aire, para ver si estos se asustaban. El paradero del arma es desconocido, ya que el garrafero la arrojó cuando se fue del lugar.
Por los hechos ocurridos en aquel momento, hay seis imputados. Tanto Ochoa como su empleado, que lo acompañaba ese día, fueron heridos con puntazos en las piernas.