Está prohibido cualquier artefacto de calefacción que no sea de tiro balanceado en dormitorios y baños. Se recomienda apagar este tipo de artefactos por la noche antes de dormir. Nunca usar hornallas de cocina o braceros para calefaccionar los ambientes. Hacer revisar todos los años las estufas y los calefones por un gasista matriculado.