El secreto de confesión está amparado de manera categórica tanto en la religión como en el ámbito jurídico. Un clérigo escuchó la confesión de un violador, el caso derivó en la Justicia y el acusado alegó una profanación al secreto que lo asiste el confesionario. La pregunta legal ahora tiene que ver si el sacerdote incurrió o no en un delito. El caso es apasionante y abre el debate sobre las variaciones de interpretación del "secreto de confesión" en religiones diferentes a la católica.
judiciales