Muchas madres enviaban a sus hijas a las escuelas de danza, pero ellas también soñaban con tener su espacio propio, el problema es que no se creían capaces de hacerlo por la edad, pero Mili les enseñó que todo es posible.
A su vez, conocemos la historia de Ana, quien aún luchando contra el cáncer de mama, se sumó al espacio y recibe el apoyo incondicional de sus compañeras y amigas. Mirá el video para conocer mas historias de mujeres que rompen con todos los techos y barreras.