Un nene de 5 años sufrió la mordedura de un perro pitbull en la cabeza. La lesión fue grave y perdió casi toda la oreja. El vicedirector del Hospital de Niños, Dr. Adrián Fonseca advirtió que la capacidad auditiva interna no se vio afectada pero la falta del pabellón auricular pero obliga a programar una cirugía reconstructiva. Por el momento habrá que observar que no se presenten infecciones que compliquen el cuadro clínico.
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