Solo tenía seis años. Estaba de vacaciones en la playa, descansando y disfrutando el relax. Pero algo raro sucedió.
"La Virgen se presentó a los pies de mi cama. Ocurrió en Villa Gesell, donde veraneaba. Estaba allí, con su manto celeste. Me asusté mucho", contó Flor Peña. Según recordó tras muchos años de mantenerlo en la intimidad, la actriz tuvo "mucho miedo" aquel día y la experiencia quedó grabada en su memoria.
Con el tiempo, llegó a comprenderla y le dio sentido para su vida profesional. Tal es así que antes de estrenar una obra de teatro recurrió nuevamente a la religión. "Nunca volví a conectarme con esa situación. Hasta que en 2012, antes de estrenar El hijo de puta del sombrero, conté la experiencia y me dijeron: 'Andá a buscar una imagen que se parezca a la Virgen que viste, que te está cuidando'".
Aunque creer es cuestión de fe, lo cierto es que tanto en la obra como en cada proyecto que encara, a Florencia le va muy bien en la vida. ¿Estará angelada?