El hallazgo de los hermanos Alfonsina, de 2 años, y Francisco, de 6, junto a su padre muerto dentro de un auto en el arroyo Don Esteban, estremeció a Uruguay.
La tragedia ocurrió tres días después de que Andrés Morosini los secuestrara por la fuerza de la casa de su expareja en Mercedes y escapara a gran velocidad. Este viernes, las autoridades brindaron detalles sobre la investigación y coincidieron en que se trató de un crimen premeditado.
En conferencia de prensa, el jefe de Policía de Soriano, Luis Enrique Rodríguez, planteó la hipótesis de la intencionalidad en el accionar del padre: “Hubo un elemento que fue contra el trabajo nuestro que fue la premeditación”. Según explicaron, Morosini condujo a más de 120 km/h en su intento por ganar ventaja frente al operativo que se activó inmediatamente después de la denuncia de la madre.
Los cuerpos fueron encontrados dentro del auto rojo con el que Morosini escapó, sumergido a tres metros de profundidad en el kilómetro 58 de la ruta 20, en Río Negro.
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El hombre había logrado cruzar de un departamento a otro antes de que se montara el operativo, lo que explica por qué pudo pasar un peaje sin ser detectado. “Cuando tenemos la noticia, esta persona ya había salido del departamento y cuando empezamos la acción, gran parte de eso ya había pasado”, lamentó Rodríguez.
El subdirector de la Policía Nacional, Alfredo Clavijo, defendió el trabajo de las fuerzas de seguridad y destacó el esfuerzo desplegado: “Pusimos a la orden de esta operación a todas nuestras unidades para dar con estos dos menores”.
En esa línea, subrayó: “Pusimos a la orden a más de 300 hombres y mujeres policías en toda la zona y dimos alerta en todo el territorio nacional para poder dar con estas criaturas. Queremos darle garantías a la comunidad de que lo dimos todo y que desde el primer momento la Jefatura cumplió con todos los protocolos”.
Desde el miércoles, la madre de los niños, Micaela Ramos, había denunciado la desaparición y pidió desesperadamente colaboración. El Ministerio del Interior había emitido una alerta nacional y la Interpol había sido notificada para intentar dar con el paradero de Morosini y los pequeños.
Ahora, con el hallazgo, la investigación se centra en esclarecer los detalles de cómo se produjo el hecho y confirmar si el hombre planificó el desenlace desde el inicio.