Un episodio digno de una película ocurrió en pleno centro de Auckland, Nueva Zelanda. Un hombre de 32 años fue arrestado en pleno asalto a una joyería y se tragó un valioso colgante Fabergé.
Si bien el hecho ocurrió el pasado 28 de noviembre recién fue dado a conocer en la tarde de este miércoles. A pesar de que ya pasó casi una semana del suceso, la Policía aún no logró recuperar la joya.
Según indicarons los medios locales, el sospechoso tomó una pieza de colección conocida como James Bond Octopussy Egg, una edición especial inspirada en la película Octopussy de 1983, y lo engulló antes de escapar.
La pieza, valuada en 33.585 dólares neozelandeses (unos 20.000 dólares estadounidenses), está elaborada en oro amarillo de 18 quilates, decorada con 60 diamantes blancos y 15 zafiros azules, y guarda en su interior un diminuto pulpo de oro con dos diamantes negros como ojos, según la descripción publicada por la propia joyería.
Tras el episodio, el detenido fue trasladado para un examen médico y quedó bajo estricta supervisión policial. El inspector Grae Anderson, quien está a cargo del caso, confirmó en un comunicado que se le asignó un oficial para vigilarlo permanentemente y reiteró que el preciado colgante “aún no ha sido recuperado”.