El presidente de Estados Unidos, Barack Obama inició una gira histórica de tres días por Cuba. Hace 88 años que la isla no recibe a un mandatario norteamericano. De esta forma, marcó un hito en las relaciones entre ambos país.
Tras aterrizar en la capital cubana, Obama visitó el centro histórico de La Habana donde lo esperaba el cardenal Jaime Ortega. Por supuesto, la agenda incluye el encuentro tan esperado con el presidente cubano, Raúl Castro, en el Palacio de la Revolución. Esta reunión clave se llevará a cabo el lunes 21, donde el norteamericano depositará una ofrenda floral en el monumento de José Martí.
El último día, el mandarario estadounidense brindará un discurso en el célebre teatro habanero Alicia Alonso. Entre tantos otros encuentros, se espera un gran y descontracturado final. Al parecer, asistirá a un histórico partido amistoso de béisbol, que tiene de protagonista a la selección cubana contra el equipo de los Tampa Bay Rays, de Florida.
Barack Obama viajó acompañado de su esposa y primera dama Michelle, sus hijas Sasha y Malia y su suegre, Marian Robisnson. Además, la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dos senadores demócratas y uno republicano.
Una imagen para la historia: el Air Force One de Obama, a punto de aterrizar en Cuba. Foto: EFE.