Las calles de Culiacán, en el estado de Sinaloa, se convirtieron en un campo de guerra este jueves. Ocurrió luego de que las fuerzas de seguridad de México detuvieran al hijo del Chapo Guzmán en una casa... Pero el arresto duró solo dos horas. Los efectivos debieron abandonar la vivienda sin llevárselo.
La rápida y violenta reacción de un ejército narco del cartel de Sinaloa obligó a que dejaran libre a Ovidio Guzmán López para evitar un baño de sangre, informó El Universal. La liberación tuvo el aval del propio presidente, Andrés Manuel López Obrador.
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"Se decidió proteger la vida de las personas y yo estuve de acuerdo con eso. No se trata de masacres. Eso ya se terminó. No puede valer más la captura de un delincuente que la vida de las personas", sostuvo el primer mandatario ante los medios.
Según informó el Gobierno mexicano este viernes, la guerra en plena ciudad dejó el saldo de ocho muertos (cinco presuntos agresores, un agente, un civil y un preso) y 16 heridos. Además, se fugaron 49 presos del penal de Aguaruto y hasta el momento habían recapturado a solo dos.
¿Qué pasó con Ovidio Guzmán López? El hijo del exlíder de la organización criminal, quien está preso en una cárcel norteamericana tras ser condenado a perpetua, está acusado de narcotráfico en Estados Unidos. Tras la captura, se planeaba su extradición. Ahora Guzmán López ya se comunicó con su familia y nadie sabe donde está, informó su abogado.
México no sale del asombro... Y de la indignación.