Voluntarios y veterinarios de la asociación Saving the Survivors encontraron a Hope hace una semana en Lombardini, provincia Oriental del Cabo, en estado muy grave.
Es una hembra de rinoceronte blanco de 4 años que tenía muy pocas posibilidades de vivir por haber sido atacada por un grupo de hombres.
Le aplicaron un dardo anestésico y le amputaron los cuernos, dejándole una grave herida, por donde perdió mucha sangre.
Por suerte dos días después fue encontrada y tras una operación se recupera y lograron salvarle la vida, a una especie que está en peligro de extinción.
La caza de estos animales ya causó la muerte de 668 rinocerontes en 2013 y en 2014 creció a 1004.