Cada vez son más los casos de menores de edad que son utilizados como explosivos humanos en los conflictos armados que enlutan al mundo entero.
Un nuevo ejemplo se conoció horas después del atentado perpetrado por un chico de entre 12 y 14 años que dejó 51 muertos en una boda de Turquía.
En la ciudad iraquí de Kirkuk, un chico fue detenido con un cinturón explosivo en su cuerpo. Llevaba escondida la carga debajo de la camiseta número 10 del Barcelona que usa el argentino Lionel Messi.
La detención del niño por parte de tres miembros de la policía local fue filmada. En el video puede verse como lo mantienen inmóvil para retirarle el cinturón bomba.
Luego, fue trasladado a una comisaría. Allí, relató que lo habían secuestraron hombres enmascarados, que le colocaron los explosivos y lo enviaron a la zona, según explicó el agente de inteligencia, Chato Fadhil Humadi.