La historia de Elizabeth "Lizzy" Myers conmociona al mundo entero. Se trata de una nena de sólo 5 años que sufre el síndrome de Usher, una extraña enfermedad que la dejará ciega y sorda en poco tiempo.
Hace unos meses, ella manifestó cuál era su sueño antes de perder la vista y el oído por completo. No pidió conocer a ningún superhéroe o a una estrella de la televisión. Ella quería "ver al menos una vez en la vida al Papa Francisco".
Y su deseo se convirtió en realidad en la mañana de hoy. Junto a sus padres, Steve y Christine, y su hermana menor, viajó al Vaticano y presenció, en primera fila, la Audiencia General que encabeza el Papa cada miércoles. Francisco la saludó y ella lo abrazó. Luego, el Santo Padre le bendijó los ojos, le acarició la cara y le regaló un rosario. Mirá el video:
La compañia aérea Turkish Airlines le regaló los pasajes para toda la familia y la asociación católica Unitalsi se hizo cargo del hospedaje en Roma. Su caso tomó dimensión mundial cuando un diario local entrevistó a la familia visitando un observatorio astronómico.
Cuando la familia Myers se enteró de las consecuencias de la enfermedad, elaboraron una lista de lugares y cosas para que ella pueda ver y mantener en su memoria. El listado incluye recorrer algunas maravillas naturales como el Gran Cañón del Colorado o las cataratas del Niágara y placeres más sencillos como observar las estrellas en familia o una puesta de sol en la playa.