Las prostitutas enfermas con el virus del Sida venden sus cuerpos sólo por dos dólares. Las visitan los hombres de esa nacionalidad, pero también entran los turistas sexuales que buscan experiencias fuertes y peligrosas.
El fotógrafo Tom Koene entró al barrio Badia de la ciudad de Lagos, para retratar los rostros de las mujeres y mostrar las condiciones de hacinamiento en las que viven. "Cuando te vas acercando con el coche, puedes oler el virus del HIV desde fuera", le dijo el taxista antes de llegar a la zona roja.
Nigeria tiene 3 millones de personas infectadas y es el tercer país con mayor cantidad de contagios, según el Centro Nacional de Biotecnología.
Resulta insólito que los clientes sean conscientes de la alta posibilidad de contagio, pero igualmente entran a las habitaciones,según publico un informe del diario La Vanguardia de España. "Las muchachas de ahí, cuanto más bonitas y más jóvenes, son más caras. Los hombres las visitan como si estuvieran caminando por un supermercado", contó Koene.