Mientras cumple la condena por corrupción en su prisión domiciliaria, Cristina Fernández de Kirchner se mostró desafiante. A través de un audio que se reprodujo por los parlantes durante la marcha a Plaza de Mayo de miles de sus militantes, fustigó al presidente Milei, al ministro Caputo y a la Justicia.
“Lo que más me gustó fue escucharlos cantar otra vez vamos a volver, desde hace mucho tiempo no lo hacíamos y me gusta ese vamos a volver porque revela una voluntad de tener un país donde los pibes puedan comer 4 veces al día, en el colegio le den libros y computadoras, que los laburantes lleguen a fin de mes y ahorren para comprar un autito, una casita, un terrenito, algo que sea de ellos conseguido del esfuerzo de su trabajo, bien peronista”, celebró.
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Luego endureció su crítica al actual gobierno libertario: “Los jubilados tenían remedios, Dios mio, ese país no fue una utopía, lo vivimos durante 12 años y medio y además lo dejamos desendeudado”. Y expresó una de sus frases más polémicas: “Increíble lo que han hecho y cómo lo han destruido pero así como eso fue una realidad quiero decirles que este modelo que ahora encarna Milei se cae”.
“Se cae porque es injusto e inequitativo pero porque es insostenible en términos económicos, tiene vencimiento como el yogurt, lo vimos con Martínez de Hoz y con Cavallo”, planteó. Luego fustigó al ministro de Economía, al que calificó como “impresentable” que “alquila dólares para simular que tiene reservas”. “Más chanta no se consigue”, sentenció.
“Deben entender todos y todas, incluso ellos: pueden encerrarme a mí pero no a todo el pueblo argentino. Los que están asustados son ellos, no nosotros”, reivindicó.
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Convocatoria
Aunque pidió hacerlo “sin violencia”, CFK convocó a sus seguidores “a defender la democracia con las herramientas con las que la construimos”.
“Con coraje, sin miedo pero con absoluta claridad, con amor lo vamos a hacer por esta patria que tantas veces intentaron arrodillar y tantas veces supo levantarse”, sostuvo.
E insistió con la idea de proscripción con una ironía: “No me dejan competir porque saben que pierden y su respuesta es esta, yo acá presa en San José 1111 sin siquiera salir al balcón, menos mal que no tengo macetas porque no podría regarlas, gente ridícula si las hay”.