La última Presidenta dedicó mucho tiempo y grandes cifras de dinero para ambientar el lugar, crear galerías y salones de la Casa Rosada, pero al terminar su mandato el edificio quedó en bastante mal estado.
Ya se había conocido que el gobierno kirchnerista dejó en estado de abandono la Residencia Presidencial de Olivos y también, los montos elevados que ordenaron gastar los Kirchner en reparar y ambientar a gusto las habitaciones de Máximo como de Florencia.
Ahora, la auditoría que hizo la administración de Mauricio Macri en la Rosada muestra el abandono de la azotea, el peligroso estado de los tableros eléctricos, la humedad expuesta en muchos lados, pero sorprende en los zócalos de la planta baja de la Rosada, como en el mismo Patio de las Palmeras, lugar de acceso al ingresar a la casa del Poder Ejecutivo.
El relevamiento hecho por la Secretaría General de Presidencia, que encabeza Fernando De Andreis, incluyó además de la Casa Rosada y la Quinta de Olivos, el edificio de la ex Somisa donde los archivos de documentación son un verdadero caos.
Esta auditoría permite confirmar que el cuidado y atención de Oscar Parrilli y demás funcionarios ocupados en el mantenimiento de la Rosada solo estaba puesto en los lugares por donde pasaba Cristina.