Daniel Scioli salió con los tapones de punta y le contestó a Cristina y a Máximo Kirchner en medio de una caliente interna oficialista. En ese sentido, reafirmó su precandidatura a presidente por la nueva coalición Unión por la Patria y defendió las Paso.
"Yo no soy títere de nadie. La gente está enojada y necesita tranquilidad y democracia", expresó en diálogo con Noticiero Doce como respuesta a la vicepresidenta, quien este jueves sostuvo que "algunos pusieron más empeño en ir al Partido Judicial".
Scioli se definió como una persona "moderada y humilde" y aseguró que representa "a los trabajadores y a la clase media". Sin entrar en detalles, apoyó a Alberto Fernández en su postura a favor de las Paso. "Comparto porque la gente tiene que decidir", indicó.
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"El 13 de agosto la gente tendrá que elegir la mejor opción y yo voy a las elecciones con total independencia, autonomía, decisión y convencido de lo que hay que encarar en Argentina", añadió.
El embajador de Brasil planteó que "acá, más que K o no K, hay que ir al futuro, para adelante". En ese punto, se refirió a Juan Schiaretti, también precandidato para las presidenciales: "Muchas de las cosas que propone, yo las comparto, mi identidad también es cerrar la grieta".
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Respecto al guiño reciente de Patricia Bullrich, que le dijo que lo iba a necesitar si era presidenta, el exgobernador de Buenos Aires manifestó: "Todos nos vamos a necesitar, y yo tengo respeto por Patricia por el trabajo que está haciendo".
"El camino es un gran acuerdo nacional y un gobierno de unidad nacional. Tiene que haber un liderazgo político, pero con un pensamiento de integración y con acuerdos", opinó Scioli.
El mensaje a los cordobeses
Daniel Scioli también se hizo eco de las últimas declaraciones de Cristina Kirchner, cuando desde Río Gallegos dijo que en Córdoba "no quieren a los K". Para el precandidato, en la provincia "quedaron heridas profundas" durante el gobierno kirchnerista. "Yo los entiendo, hay que comprenderlos", declaró.
En concreto, detalló dos situaciones puntuales. Primero, "el conflicto con el campo", haciendo referencia al paro agropecuario, lock out y bloqueo de rutas, que se extendió por más de cuatro meses en 2008.
Scioli además nombró "la sublevación de la Policía". En este caso, puso el foco en el acuertelamiento policial en Córdoba de diciembre de 2013, que dejó un saldo de cientos de heridos, un muerto y miles de comercios destruidos.
En aquel momento el por entonces gobernador José Manuel de la Sota llegó a pedirle ayuda por redes sociales a la expresidenta Kirchner y denunció que la Provincia llamó "a todos los ministros del Gabinete, pero nadie respondió". "Es lamentable porque los saqueos se evitaban con la presencia de la Gendarmería", se quejó aquel día el exmandatario cordobés.