"A Aníbal Fernández no lo conozco, nunca lo he visto en mi vida, nunca he estado en obra pública, no soy proveedor del Estado, solo me he dedicado a trabajar, mi negocio es el tabacalero". Así, casi con desesperación, Carlos Tomeo salió a despegarse del ex jefe de Gabinete de Cristina Kirchner.
Lo hizo luego de que, este jueves, la Policía Metropolitana encuentre 4.000.000 de pesos y joyas en una de sus 10 casas en un country. Ese allanamiento fue impulsado por la denuncia de Elisa Carrió, quien aseguró que es el testaferro de Aníbal.
"Que dé la cara y diga que no me conoce, su silencio no sirve", reclamó el empresario.
"Que dé la cara y diga que no me conoce, su silencio no sirve", reclamó al ser entrevistado en América TV. "No entiendo por qué Carrió me vincula a Aníbal Fernández", se quejó.
Sobre el dinero encontrado en el allanamiento, argumentó que lo tenía escondido debajo de una escalera "porque mi consuegro lo guardó cuando me fui de vacaciones". "En la industria tabacalera se mueve todo en efectivo. Los kiosqueros pagan en efectivo, no con cheques. Estoy aportando todos los documentos", aclaró.