A solo 14 días de que Cristina Kirchner deba ponerle la banda presidencial a Mauricio Macri, el kirchnerismo protagonizó un papelón en la Cámara de Diputados. Después de hacer malabares durante toda la tarde para lograr quórum, aprobó leyes que condicionarán la gestión del próximo Presidente.
El escándalo incluyó cuartos intermedios de cinco horas, el rechazo de la mayoría de la oposición, que se fue de la Cámara, y hasta deserciones oficialistas que pusieron en riesgo el objetivo K. Con diputados de partidos de izquierda y la aparición casi milagrosa de un dirigente propio, juntaron los proyectos en dos grandes paquetes y los aprobaron en tiempo récord.
Por supuesto, no hubo ningún tipo de debate en el recinto. Los dirigentes opositores volvieron a quejarse por las medidas exprés y reclamaron que la sesión no avance, pero no hubo caso.
¿Quién fue el hombre clave de la tarde? Se trata de Isaac Bromberg, que apareció sobre la hora para llegar a los 129 diputados y lograr quórum. Según detalla Clarín, el primo del polémico ex gobernador tucumano, José Alperovich, no presentó proyectos en todo 2015 y asistió apenas al 34,55 por ciento de las sesiones. Hoy, justo en el "día K", dio el presente.