No hubo desprecios, venganzas, ni revanchas. Hubo sentido común y respeto por el voto de la gente.Una vez más quedó demostrado que lo que debería ser normal en nuestro país en muchos casos se convierte en un hecho novedoso.
Randazzo coronó su tarea recibiendo a su sucesor sin mezquindades y pensando en la Patria por sobre todas las ideologías. Entregó al funcionario de Cambiemos el “plan quinquenal” y dio su palabra de ayudar al nuevo ministro “para que sea mucho mejor que yo y tenga más éxito que yo, porque eso quiere decir que se siguió mejorando la vida de la gente”, expresó.
Por su lado el nuevo ministro de Transporte destacó que la reunión fue "muy buena". Además recordó que con Randazzo trabajaron intercambiando información durante 3 años y medio y esa relación no se interrumpió cuando el hombre del oficialismo se dedicó a la campaña a presidente que después frustró el propio kirchnerismo.
Dietrich señaló que "hacer una transición como ésta, es muy valorable y positivo para la gente". Cabe destacar que el nuevo ministro llegó a la casa rosada pedaleando en su propia bicicleta.