Falta de controles, irregularidades varias y sobreprecios por 46 mil millones de pesos. El fiscal Gerardo Pollicita describió esos patrones en un dictamen de 300 páginas que presentó en la causa contra Cristina Kirchner por asociación ilícita.
Según el informe, que publicó La Nación, para beneficiar al empresario con obras hubo direccionamiento y falta de controles. Los patrones comunes fueron descriptos por Pollicita como "una matriz general para adjudicar irregularmente las licitaciones", en un cuadro que hizo imprimir en tela y ocupa toda una pared de la fiscalía, de tres metros por tres.
Los puntos del mecanismo incluirían los siguientes pasos:
- Se presentaban varias empresas de Báez a una misma licitación y alternaban las adjudicaciones.
- Había un aumento del presupuesto oficial.
- Se consentían sobreprecios.
- Se otorgaban las obras por encima de la capacidad de ejecución.
- Se asignaban nuevas obras públicas a pesar de incumplimientos previos.
- Se adjudicaban otras obras en tiempo récord pese a que existía un único competidor.
Cristina apeló
Con un escrito, la ex mandataria presentó la apelación al procesamiento que decidió el juez Claudio Bonadio en la causa Los Sauces. No solo se declaró inocente, sino que también calificó a la medida como absurda, arbitraria, descabellada, ilógica y antojadiza.
"La causa resultó ser un mero montaje que inevitablemente iba a concluir como se imaginaba: con el dictado de un procesamiento, decisión que naturalmente ya estaba tomada desde el inicio mismo del proceso", argumentó.