Juan Carlos Schmid, uno de los integrantes del triunvirato que dirige la Confederación General del Trabajo, fue el encargado del anuncio: porque "se ha quebrado la confianza", se suspendieron "las negociaciones en la mesa de diálogo" que conformaban los gremialistas con el Estado y los principales empresarios.
"Es una respuesta a los incumplimientos empresarios y la apatía del Gobierno Nacional para intervenir en esta oleada de despidos, suspensiones y atrás de salarios que está golpeando en diversos lugares", expresó el dirigente.
"Va a haber alguna reacción de acá a marzo", amenazó la CGT.
Además, agregó que una de las razones fue que no se cumplió el convenio alcanzado en noviembre del 2016 para que no haya despidos hasta marzo próximo. "Todo el acuerdo negociado de buena voluntad entre las partes se ha violentado", dijo.
En ese sentido, y sin mencionar si se tratará de un paro nacional, Schmid vaticinó una medida de fuerza. "Va a haber alguna reacción de acá a marzo", adelantó.