"Sur" es la moneda común entre Argentina y Brasil que los presidentes Alberto Fernández y Lula Da Silva buscan crear como avance en la integración comercial bilateral. La firma del acuerdo estratégico tiene como objetivo que se convierta en una moneda regional del Mercosur.
Este desafío en la macroeconomía fue analizado por la Bolsa de Comercio de Córdoba, que hizo foco en el poder adquisitivo del actual billete de mayor denominación de Argentina. Se trata del de 1.000 pesos, que al tipo de cambio oficial alcanza para 5,4 dólares, mientras que tipo de cambio paralelo se pueden comprar solo 2,6 dólares.
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Para los autores del informe, el subdirector del Instituto de Investigaciones Económicas, Fabio Ventre, y la investigadora Martina González, se trata de "la peor marca de la región".
En un análisis comparativo con otros países de la región, expusieron que Brasil, cuyo billete de 200 reales es el de mayor denominación, equivale a 39,3 dólares. Esto significa que vale 15 veces más que el de 1.000 pesos argentinos valuados al tipo de cambio paralelo.
+ Gráfico 1: poder de compra del billete de mayor denominación en dólares
¿Cuál debería ser nuestro billete de mayor denominación?
Si se quiere alcanzar el valor de compra en dólares de las monedas del resto de los países de la región, el billete argentino debería ser de 2.500 pesos para replicar a Paraguay (100 mil guaraníes).
Pero al comparar con Brasil, debería ser de 15.000 pesos y así sería equivalente al de 200 reales. Mientras que si se piensa en Uruguay –ubicado en el podio de los países con mayor poder de compra- hay que pensar en un billete de 20 mil pesos para igualar al de 2.000 pesos uruguayos.
+ Gráfico 2: poder de compra del billete de mayor denominación en pesos argentinos
Las razones del deterioro del peso
La Bolsa de Comercio de Córdoba sostiene que este problema es “un síntoma más de los desequilibrios de la macroeconomía argentina y su reciente profundización”.
En diciembre de 2017, fecha en que comenzó a circular, el billete de 1.000 pesos equivalía a 58 dólares. Ventre y González afirman que “si hubiera mantenido su valor, hoy sería el de mayor poder adquisitivo en toda la región”.
Pasaron cinco años y el billete de mayor denominación del país se ubicó último en el ranking después de perder un 96 por ciento de poder de compra en dólares medido al tipo de cambio paralelo.
Para los autores del informe, “este es el resultado lógico de una inflación que hoy se encuentra descontrolada y en ascenso”. Sostienen que la inflación “deriva de la elevada emisión monetaria, que tiene origen en el déficit fiscal del Gobierno nacional”.
En conclusión, señalan: “Mientras no se elimine el sesgo deficitario del sector público no podrá garantizarse la independencia del Banco Central ni, por ende, la estabilidad de los precios”. “Hasta que esto no ocurra, por más que se emitan billetes de mayor denominación, no podrá detenerse la destrucción del valor del peso argentino”, subrayaron.
+ Gráfico 3: poder de compra del billete de 1.000 pesos argentinos en dólares