Miércoles de tensión total en el Gobierno nacional. Luego del mediodía, varios funcionarios kirchneristas renunciaron al Gobierno nacional y provocaron un cimbronazo en el Frente de Todos. El primero en anunciar la decisión fue Wado de Pedro, pero luego se sumaron algunos más.
Los diez funcionarios cercanos a Cristina Kirchner que pusieron a disposición su renuncia fueron: Martín Soria (ministro de Justicia); Roberto Salvarezza (Ciencia); Tristán Bauer (Cultura); Jorge Ferraresi (ministro de Hábitat); Juan Cabandié (Ambiente y Desarrollo Sustentable); Paula Español (Secretaria de Comercio Interior); Luana Volnovich (PAMI); Fernanda Raverta (ANSES); Martín Sabbatella (Presidente de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo) y Pablo Ceriani (titular de Aerolíneas Argentinas).
Lo cierto que en medio de este escenario caliente en el seno del Gobierno nacional, Alberto Fernández convocó a una reunión de urgencia a su equipo. El primero en llegar fue Santiago Cafiero, jefe de Gabinete, y luego, pasadas las 16.30 horas, llegó Aníbal Fernández, causando la sorpresa de todos. Luego se sumaron Carla Vizzotti y Sabina Frederic.
+ MIRÁ MÁS: Denuncian que funcionarios estaban teniendo sexo oral en una dependencia
El interventor de yacimiento de Río Turbio, fiel aliado a la vicepresidenta de la Nación, apareció en Casa Rosada para juntarse con el presidente y otros funcionarios, con el objetivo de analizar las masivas renuncias de la jornada.
Al ingresar, Fernández no brindó declaraciones, pero sí lo hizo al culminar el encuentro. El ex jefe de Gabinete aseguró que "no hay ningún quiebre en el Gobierno ni ninguna crisis política".
Por otro lado, agregó que fue a Casa Rosada "para hablar de política con el Presidente" y desmintió que le hayan ofrecido algún puesto. "Las renuncias son un muy buen gesto político, no son una presión", cerró.