Este martes se produjo un nuevo episodio caracterizado por la confusión en el estudio de Los 8 escalones. Un participante gótico sorprendió tanto al público como al conductor Guido Kaczka con su impactante apariencia y su inesperada profesión.
Apenas Pablo ingresó al set se volvió el centro de atención de todas las miradas. El jugador llevaba puestos grandes expansores blancos en las orejas y tres prominentes piercings con forma de cuernos, los cuales asomaban de su frente y mentón. Además se podía observar sobre su piel muchos tatuajes de todos los tamaños y colores. Incluso decidió aplicar tinta en el interior de sus ojos.
Sin embargo, el verdadero asombro llegó minutos después cuando reveló cuál es su trabajo. “¿Pablo, a qué te dedicas?”, le preguntó el presentador con gran curiosidad. “Revisó contratos”, respondió de manera breve y veloz el hombre. “¿Haces qué?”, le volvió a consultar Kaczka. “Soy revisor de contratos en una fábrica de válvulas esféricas”, detalló el concursante.
La respuesta desconcertó a los presentes debido al estilo del jugador. El conductor por su parte guardó silencio por varios segundos como reflexionando sobre las palabras de Pablo. “Ah, está bueno eso”, expresó Guido. “Está bueno ser revisor de contratos. A veces hay letras muy chiquitas, ¿verdad?”, meditó. “Claro, sí. Yo tengo que leer todo”, dijo con una gran sonrisa Pablo.