Rocío Marengo se convirtió en mamá por primera vez el pasado 3 de diciembre, cuando nació su hijo Isidro. Sin embargo, la felicidad del momento se vio atravesada por la preocupación: el bebé nació prematuro y quedó internado en neonatología, mientras que la modelo recibió el alta y volvió a su casa.
En medio de la espera y la angustia, Marengo compartió en sus redes sociales algunas fotos de una salida con amigas. Las imágenes no tardaron en generar polémica y le llovieron críticas por “salir” mientras su hijo seguía internado.
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Lejos de quedarse callada, la mediática publicó un fuerte descargo en su cuenta de Instagram. “¡La gran mentira de las redes! Mostrás un video vestida, que salís a comer con tu familia, y te juzgan de mala madre, sin saber cómo estás por dentro”, escribió.
Marengo fue más allá y apuntó: “Te ponés una remerita con lentejuelas y aseguran que te estás cagando de risa, como si la ropa dijera algo. Sus comentarios hablan de ustedes, no de mí”.
En su mensaje, la modelo también reveló detalles desconocidos sobre el embarazo y el parto. “Si quieren les muestro los coágulos y las hemorragias que tuve todos estos meses para que sepan algo más de mí antes de opinar. Se me desprendió la placenta y tampoco lo mostré ni lo conté”, confesó.
Marengo recordó el momento más crítico: “Fue de urgencia, con Isi corrimos riesgo de vida. Fue un ‘ya al quirófano’. Mi obstetra Alejandro Falco fue clave para que hoy estemos contando esta historia”.
La modelo remarcó que quienes la critican “claramente no entienden y no pasaron por algo similar, si no no se animarían a opinar”. Y fue contundente: “Sepan que jamás me harán dudar de mi rol como mamá, soy la mejor”.
El estado de salud de Isidro y el mensaje de Marengo
Sobre el final de su descargo, Marengo dejó en claro el amor y la fuerza con la que buscó a su hijo: “Busqué a mi bebé con todo mi amor, paciencia y fuerza. Isidro está muy bien, es cuestión de días y nos vamos a casa”.
La historia de Rocío Marengo y su hijo Isidro conmovió a sus seguidores, que ahora esperan el esperado reencuentro en casa.