En nada, absolutamente en nada, Wanda Nara quiere quedarse atrás. Rápida para encontrar la forma de ser noticia SIEMPRE, la modelo decidió imitar a otra personalidad que vive en la primera plana de los medios.
Al parecer, el éxito de Cande Tinelli con los tatuajes le generó algo de celos. Ni lenta ni perezosa, decidió buscar al primer tatuador de Milán y someterse a sus agujas.
Además, la esposa de Mauro Icardi tuvo un día a pleno Instagram y compartió varias actividades. Entre las actividades estuvo el tratamiento VIP para la piel de su cara, que cada día está mejor.
Tanto resultado le dio el paso por la especialista, que decidió compartir su sonrisa sin una gota de Photoshop. Mirá cómo se lució Wanda a cara lavada: