Hay amores inolvidables que marcan las vidas de las personas. Los sentimientos muchas veces son tan fuertes que es difícil desprenderse y olvidarlos rápidamente. A Cardone le pasó algo de esto con su mascota Matute.
Su lindo gatito murió y le dejó un vacío tan grande en su vida que decidió embalsamarlo con una técnica milenaria y tenerlo en su hogar. Pero un día se le ocurrió sacarlo a pasear y lo llevó hasta la basílica de Luján. Se tomó una fotografía y la subió a las redes sociales. La imagen dio mucha tela para cortar.¿Era para tanto? se preguntaron muchos.
Lo cierto fue que entre comentarios a favor y en contra, Daniela dobló la apuesta. Visitó a su tatuador amigo y se estampó un súper Matute que le cubre casi todo el brazo. ¿Qué te parece esto?