Muchas modelos y vedettes que inician su carrera en los medios sienten la necesidad de mejorar su imagen, someterse a cirugías estéticas, que muchas veces son exigidas por los mismos que las contratan.
Jimena Cyrulnik (40) decidió sacarse las lolas contra la expresa voluntad de su marido, el fotógrafo Lucas Kirby (44). “Está pasando el duelo y está saliendo, pero estuvo mal, medio triste”, aseguró entre risas. La modelo se agregó las prótesis en 2010, después de amamantar a su hijo Calder.
Sus medidas naturales estaban entre 85 y 90, pero “cuando quedé embarazada, pasé a un XL de lolas, y cuando dejé de amamantar, no volvió a la normalidad”, contó Cyrulnik. Si bien pensó en dejarse las prótesis y “aprovecharlas y jugar un poco” creyó que era el momento de volver “a un tamaño un poco más parecido al que tenía antes de ser mamá”, expresó.
Ahora bajó tres talles de corpiños, pero sostuvo que así está feliz y era lo que quería hacer hace mucho tiempo. “Fue un tema meramente estético. Tenía mucha lola y no la aprovechaba. Ya había pasado de moda y no las llevaba con la actitud que una tiene que llevarlas”, confesó la modelo.