Nazarena Vélez estuvo invitada al programa de concientización social llamado "Seres Libres", conducido por Gastón Pauls, donde se abrió como nunca antes, y describió el oscuro momento que vivió en el pasado, vinculado al uso abusivo de anfetaminas, y luego alcohol.
La mamá de Barbi Vélez ha sufrido numerosos episodios complicados en su vida. Desde su transtorno alimentario cuando era chica, pasando por las presiones que padecía en el pico máximo de su fama, la muerte de su hermana Jazmín en un accidente automovilistico, o el suicidio de Fabián Rodriguez, el papá de su hijo menor.
La actriz aseguró: "Cuando deje las anfetaminas, me dijeron que la sobredosis que había tomado, eran como 30 líneas de cocaína. Para mí es una droga, fuertísima". Nazarena afirmó que a los 14 años de edad comenzó con los diuréticos y laxantes porque "siempre fue gordita", y para ella ser así era "una mala palabra". Aseguró que comenzó con dos pastillas, y terminó con 30 por día.
A su vez, destacó que si bien ella se daba cuenta del daño que se hacía, observaba que a su alrededor todo iba mejor. "Me daba el resultado que yo necesitaba, cuando más flaca estuve fue cuando más trabajo tuve", sostuvo Vélez.
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Además, Nazarena contó el momento en que la cabeza le hizo 'click': "Tomé noción cuando me estuve por morir, me pegué una sobredosis de pastillas. Me comí una hamburguesa y me dije ¿esto con qué se equipara? Con muchas más pastillas. Fue el 16 de noviembre de 2008, estaba en la cama inmovilizada, sentía que tenía bichos en el cuerpo".
Respecto a su recuperación, la actriz comentó que no fue nada fácil, no solo por la dificultad que implica sobrepasar un adicción, sino además por el trato de los medios en aquel entonces. "Yo estaba luchando por dejar las pastillas y todo el mundo estaba diciendo cuan gorda estaba. A nivel público fue lo peor que me pasó. No se tiene dimensión del daño que se hace desde el exterior a uno. Lo que yo recibía del afuera era “la estás cagando, volvé a consumir porque no estaría siendo muy aceptado tu nuevo cuerpo”.
Vélez también recordó el momento en que Fabián Rodriguez se quitó la vida. Afirmó que al quedarse sola, todos los días, en medio de sus ataques de llanto, comenzaba a tomar alcohol a las 8 de la noche, una vez que acostaba a su hijo menor. "Cuando falleció Fabián, me quedé sola y perdí todo, todos los días tenía ataques de llanto; fue cuando empecé a tomar alcohol. Acostaba a Titi a las ocho y abría la primera botella de vino, podía tomarme 4 o 5 litros sola."