Parece una broma pesada para cualquier amante del rock, pero lamentablemente es cierto: Chester Bennington, a sus apenas 41 años, se mató este jueves en su residencia de Palos Verdes, Los Ángeles, Estados Unidos.
El portal TMZ -referencia en noticias del espectáculo en ese país- informó que se ahorcó y el cuerpo fue encontrado a las 9 de la mañana. El cantante tenía seis hijos y estaba casado.
Aunque en los últimos años se lo consideraba sobrio, luchó durante toda su vida con adicciones a las drogas y el alcohol. En una entrevista de varios años atrás había reconocido que sufrió profunda depresión por sufrir abusos de un hombre mayor cuando era niño.
Una triste coincidencia
Bennington decidió quitarse la vida en el día que cumpliría años otro reconocido cantante, Chris Cornell. Este último, líder de bandas como Soundgarden, Audioslave y Temple of the Dog, se suicidó el pasado 17 de mayo. El cantante de Linkin Park inclusive interpretó "Hallelujah" durante los funerales y era el padrino del hijo de Cornell.