Benjamín Vicuña habló por primera vez de sus historias de amor y abrió su corazón. Habló a fondo sobre su relación y ruptura, primero con Pampita y luego con la China Suárez.
El actor chileno desembarcó en Argentina en 2008. Estuvo 10 años en pareja con la modelo y se convirtió en papá de cuatro hijos: Blanca, Bautista, Beltrán y Benicio. En 2015 se separaron y Vicuña inició una relación durante seis años con la actriz y fruto de ese amor nació Magnolia y Amancio.
A lo largo de su carrera estuvo vinculado sentimentalmente con varias figuras del mundo del espectáculo. Pero nunca antes había reflexionado sobre el final de estas dos historias y se sinceró. Lo hizo en una entrevista para el programa chileno De Tú a Tú.
+ MIRÁ MÁS: El concursante de las cábalas perdió “por un arroz” y se quedó sin récord en Los 8 Escalones
Sin filtros, Benjamín Vicuña sostuvo que a pesar de que los proyectos de pareja con Carolina Ardohain y Eugenia Suárez no funcionaron, no los consideró un fracaso por los dos proyectos de familia que construyó con ambas personas.
“Es imposible hablar de fracaso cuando veo a mis hijos. Son la cara, el rostro, del amor, de la pasión, del esfuerzo, de esas ganas de construir, de aferrarse a la vida, de seguir adelante, del amor”, expresó.
Pero reconoció que tuvo momentos donde las dudas y las sensaciones de arrepentimiento lo atravesaron porque las cosas pudieron ser de otra manera. “Es un ejercicio melancólico que no sé si suma mucho. Más que para un desarrollo de madurez, de saber que las cosas se pueden mejorar”, señaló.
Ante la consulta si sintió que luchó por ambas parejas, Vicuña dijo sin vueltas que “sí”. “¿Hasta el máximo?”, le preguntó el conductor chileno Martín Cárcamo, y él respondió: “Todo”.
“Tengo otras deudas, pero sí luché, me la jugué, aposté todo… Las otras deudas son de madurez, de momentos, de actitudes, de errores, de muchos errores”, agregó. En ese sentido, el actor sostuvo que “es parte de nuestras contradicciones, de nuestra naturaleza, cagarla, equivocarse”. “A veces se aprende, otras veces no. En mi caso, soy bastante humilde, ordenadito, y aprendo. Me quema y no vuelvo a quemarme”, concluyó.