Soledad Silveyra estuvo invitada al primer almuerzo del año que conduce Juana Viale los domingos, y comentó los cambios que atravesó a raíz del complejo episodio que vivió a principio de año.
La actriz reconoció que ese hecho se trató de un episodio que representó una alarma importante que la obligó a modificar algunos hábitos. “Dejé de fumar pero me cuesta, hago dieta y no como nada dulce. Tengo que caminar y tomar mucha agua”, manifestó Solita.
Ya recuperada, recordó cuáles fueron los indicios que la motivaron a pedir una consulta con su médico. "En agosto mientras hacía Mujeres tuve un mareo muy raro, como un tembleque de la pierna, me habrá durado 30 segundos y el productor me agarró. En octubre tuve otro. Después el 22 de diciembre mientras hacía las compras navideñas con mis nietas mayores, se me cayó la billetera y la cara de preocupadas de las chicas me hizo dar cuenta que tenía que ocuparme”, indicó la actriz.
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Silveyra asegura que es consciente de la suerte que tuvo y sabe que su corazonada es lo que la terminó salvando. Afirmó que no podía creer cuando le dijeron que había tenido un ACV, ya que nunca imaginó que existían casos asintomáticos.
En aquel momento, Soledad había intentado llevar tranquilidad mediante un mensaje, y explicó cómo se había dado todo: "Simplemente quiero comunicarles que estoy bien. Vine a hacerme ayer una resonancia magnética, donde salió que había tenido un leve ACV. Después sí, se descubrió que tenía la carótida izquierda tapada. Tras hacerme todos los estudios correspondientes en el Sanatorio Otamendi, me llevaron a la Sagrada Familia, donde me atendió el equipo del doctor Pedro Lylyk. Me hicieron los mismos estudios y una angioplastía, donde al llegar a la carótida vieron que no estaba en condiciones de ponerme un stent”.
