El miércoles de la semana que viene era la fecha de arranque del juicio contra Pity Álvarez, pero el Ministerio Público Fiscal (MPF) decidió suspenderlo otra vez por los problemas de salud que atraviesa el músico.
Cabe recordar que el líder de "Intoxicados" y "Viejas Locas" está imputado y preso por un crimen ocurrido en julio de 2018 en Villa Lugano. El proceso judicial debía comenzar el próximo miércoles, pero el fiscal dio marcha atrás en las últimas horas.
El representante del Ministerio Público en el debate, Sandro Abraldes, presentó un dictámen donde explicó que Pity tiene la “capacidad de pensar marcadamente dañada” y la “capacidad de compresión de lo que significa estar en un proceso se encuentra francamente disminuida”.
"El acusado carece de las posibilidades indispensables y necesarias para el ejercicio de su derecho de resistencia a la acusación y el proceso no puede avanzar hacia la realización del debate oral y público sin avasallarlo", sostuvo el fiscal.
Y en ese sentido adelantó que “surge clara la posibilidad de que, eventualmente, sea necesario disponer su internación involuntaria en un dispositivo adecuado para afrontar su cuadro de salud mental”.
El informe también indica que el artista presenta “un cuadro de trastorno depresivo, con intensa anhedonia (incapacidad para sentir placer) y apatía”.
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El fiscal requirió que se le ordene al Cuerpo Médico Forense que evalúe cada seis meses al imputado para establecer “si persisten los síntomas psicopatológicos que padece al día de hoy" y determinar si puede afrontar el juicio más adelante.
Pity Álvarez tiene arresto domiciliario y vive en la casa de su hermana, en el barrio Piedrabuena, en Villa Lugano. Después del crimen en 2018, estuvo tres años y ocho meses alojado la cárcel de Ezeiza bajo el Programa Interministerial de Salud Mental Argentino (Prisma) del Servicio Penitenciario Federal (SPF).