Ante cada nacimiento, Wanda Nara se fue tatuando el nombre de sus niños.
Lo hizo con Valentino, Constantino y Benedicto, fruto de su relación con Maxi López.
Ahora, Wanda repitió el gesto con su hija Francesca, pero esta vez lo hizo con letras bien grandes.
"Mi chiquita", tituló Nara la foto que publicó en Instagram con el trabajo terminado. Anteriormente, había subido una imagen del tatuador sin dejar ver lo que iba a hacerse.