Pasó una semana de la explosión que sacudió a barrio Marqués de Sobremonte. Una vivienda, ubicada sobre calle Valdivia y Brizuela al 540, quedó completamente destruida.
El dueño, identificado como Juan Luis Lodi de 76 años, fue encontrado muerto en el interior de una fosa de un taller que había en la parte posterior de la casa. La autopsia reveló que la causa de muerte fue un balazo en el cráneo. La principal hipótesis es la de un suicidio.
Mientras avanza la investigación y las pericias en la zona de la tragedia, siguen los problemas en el barrio. Los vecinos afectados iniciaron la reconstrucción de sus viviendas que se resultaron con graves daños materiales por la magnitud de la onda expansiva.
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Una de las casas colindantes es la que peor está, debido a que la pared de una habitación se cayó por completo. Ante esto, tuvieron que armar una estructura para sostener la construcción y evitar una segunda tragedia.
Otros propietarios comenzaron con los arreglos de las aberturas y vidrios de ventanas y puertas. Lo cierto es que todos manifestaron apoyarse mutuamente en medio del drama. Incluso se cuidan entre ellos para evitar hechos de inseguridad.
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Una incógnita en análisis
De la casa de Lodi solo quedaron escombros. Pero algunos dejaron entrever que estaban pintados y, según trascendidos, habría un mensaje oculto que intentan dilucidar.
Vecinos indicaron que el hombre fallecido habría escrito un mensaje en la pared de la casa. Una mujer, que iba a llevarle comida a los perros, aseguró que en los días previos a la explosión eso no estaba.