En agosto de 2021, un hombre identificado como M.F.G. denunció a su expareja M.A.B. por arrojarle agua hirviendo y provocarle graves quemaduras en el torso, en la espalda y en la cabeza. Pese a que la mujer negó el ataque, fue imputada por lesiones graves calificadas en exceso de legítima defensa.
A dos años del hecho, la Justicia de Córdoba resolvió absolver a la acusada en un juicio llevado a cabo en la Cámara Tercera del Crimen, a cargo del fiscal Marcelo Hidalgo.
Según la investigación, el hombre ingresó al domicilio de su expareja violando una norma de restricción y amenazó con agredirla golpeándola con una silla. Ante esto, la mujer le arrojó una pava eléctrica para preservarse. Sin embargo, la acusación sostenía que M.A.B. le arrojó agua hirviendo a M.F.G. fuera de la casa.
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Durante el juicio, se conoció que a la mujer le diagnosticaron artritis reumatoidea deformante. Ante esto, el fiscal Hidalgo descartó la denuncia de M.F.G. al remarcar que si M.A.B. “no puede levantar una olla porque sus manos no se lo permiten tampoco la puede arrojar”.
Por esta razón, concluyeron que la mujer actuó en legítima defensa y como también le habían diagnosticado osteoporosis, no podía defenderse de otra manera.
El caso
“Fui a devolver las llaves de la casa porque, por diferencias con mi ex, me iba a ir a otro lugar. Sabía que no tenía que entrar, sabía que era mejor terminar bien y me esperó con un balde con agua hirviendo que me quemó un 35 por ciento del cuerpo según lo que me dijo el médico, con quemaduras de primer grado”, relató el hombre a la web AGNoticias.
En diálogo con ElDoce.tv contó que con la acusada estuvieron casados hasta 2017, cuando se divorciaron. “El martes fui a sacar algunas pertenencias y ella me pidió que fuera el miércoles a la noche para que termináramos bien y que yo le devolviera la llave”.
Por su parte, M.A.B. dijo a este medio que su ex fue al domicilio cuando ella no estaba y esa tarde se robó la silla de su hija porque todavía tenía la llave. “Sabe que hizo mal las cosas y me está calumniando”, aseguró.
"Niego haberle arrojado agua hirviendo y que estuvo en la casa en el horario que dice. Él da esa versión porque tuve que volver a hacer una denuncia y una exposición porque tengo miedo que él vuelva a violentar el domicilio, como ocurrió en otra oportunidad cuando estábamos casados”, remarcó.
Atención
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