Fue abusada sexualmente por su papá cuando era niña en San Francisco. Hace un año se animó a denunciarlo. La Cámara del Crimen de esa localidad condenó al hombre a nueve años de prisión.
Darío Raúl Quintero llegó al juicio detenido e imputado por abuso sexual con acceso carnal, agravado y continuado. Los hechos ocurrieron entre los años 2007 y 2009. Actualmente, la víctima tiene 25 años.
Tras el fallo, la joven compartió una estremecedora carta a través de las redes sociales. Allí expresó que, después de muchos años, se sentía “bien, feliz, libre” y sobre todo “más viva que nunca”.
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Además, relató lo difícil que fue convivir con ese dolor y animarse a denunciar a su propio padre por miedo a que no le crean. “Cuesta contarlo y cuesta mucho porque siempre pensamos que no nos van a creer o a dar la espalda”, sentenció.
“Sé que no es mucho de condena lo que le dieron, pero espero que ese remordimiento nunca lo deje vivir y sé que la JUSTICIA de Dios le va a hacer pagar de por vida todo el daño que me causó y que le pudo causar a más víctimas”, continuó.
Por esta razón, dejó un mensaje para otras personas que pasaron por su situación y aún no se animaron a contarlo: “Ojalá algún día se animen a no callar más, y se puedan sentir libres, llenas de vida y con más fuerzas que nunca como yo en este momento me siento”.
+ La carta completa
“Hoy puedo decir que me siento BIEN, FELIZ, LIBRE, con la FRENTE EN ALTO y sobre todo MÁS VIVA QUE NUNCA.
Hace una año atrás denuncie a mi padre biológico DARÍO RAÚL QUINTERO por abuso en mi niñez y me costó poder contarlo, hasta con lágrimas en mis ojos y ese nudo que no me dejaba hablar por miedo. Pero al fin lo pude hacer, contar lo que viví y lo que me pasó, la persona que vivió o vive con ese dolor y tristeza por haber sido abusada sabe muy bien lo que se siente, tenés días gris y días de arcoiris al no poder contarlo y guardarte para vos misma. Y sí, cuesta contarlo y cuesta mucho porque siempre pensamos que no nos van a creer o a dar la espalda, pero a la vez sabemos que con cosas tan fuertes y dolorosas así no se mienten, porque las personas que somos abusadas sufrimos mucho como para mentir con algo tan fuerte así. Pero a su vez, no hay nada más lindo que poder contarlos, porque nos liberamos de una tremenda carga y ahí nos damos cuenta de que no estamos solas, hay personas que nos ayudan a salir adelante y demostramos que tan fuertes somos.
Sé que siempre se me van a venir esos recuerdos feos de mí abuso a mi cabeza aunque no quiera recordarlo, fue un pasado, una niñez fea pero también sé que se hizo JUSTICIA. Sé que no es mucho de condena lo que le dieron, pero espero que ese remordimiento nunca lo deje vivir y sé que la JUSTICIA de Dios le va a hacer pagar de por vida todo el daño que me causó y que le pudo causar a más víctimas.
Aunque cueste contarlo, lo puede contar y todas esas personas que pasaron o están pasando por lo mismo, ojalá algún día se animen a no callar más y se puedan SERTIR LIBRES, LLENAS DE VIDA Y CON MÁS FUERZAS QUE NUNCA COMO YO EN ESTE MOMENTO ME SIENTO. Sé que yo no tuve la culpa de lo que me pasó porque era solo una niña llena de inocencia la cual me arrebataron, pero NUNCA NUNCA SE SIENTAN CUALPABLES PORQUE NOSOTRAS NO TENEMOS LA CULPA DE PERSONAS ENFERMAS NOS HAGAN DAÑOS COMO DE ABUSARNOS.
Para todas esas personas que siempre defendieron lo indefendible, hoy les puedo decir que me SIENTO MÁS FELIZ, MÁS VIVA, CON MÁS FUERZAS QUE NUNCA Y CON LA FRENTE EN ALTO, HOY SE HIZO JUSTICIA Y MI ABUSADOR HOY VA A SEGUIR CUMPLIENDO SU CONDENA.
OJALÁ SE HAGA JUSTICIA POR TODOS LOS CASOS DE ABUSO QUE HAY DÍA A DÍA”.
Atención
Si sos víctima de violencia de género o conocés a alguien que necesite ayuda:
*Línea nacional y gratuita 144, disponible las 24 horas del día durante todo el año
*Mensaje con la palabra "hola" a la línea directa +54 9 11 2771-6463 de WhatsApp a nivel nacional
*En Córdoba: WhatsApp (351 814 1400) y al 0800-888-9898