Los vecinos de la vivienda ubicada en calle Arquímedes al 2869 no salen de la conmoción: Gladys Gutiérrez, de 64 años, apareció sin vida, apuñalada y con signos de haber sido prendida fuego.
El principal sospechoso del crimen es su yerno, Federico Boris, de 28 años. El detenido avisó a la Policía que al ingresar a la casa encontró a su suegra muerta con la mitad del cuerpo quemado.
Desde hace un tiempo, la víctima había hospedado en su casa a su hijastra, María Gutiérrez (37) junto a Boris. Esta última no está detenida pero sí la investigan.
Por el momento, se esperan conocer qué dicen las pruebas de Policía Científica y también de Bomberos.