El rostro de Mariela es otro. Después de la angustia y el dolor por el ataque en patota que dejó a su hijo en coma farmacológico, la mujer ahora se mostró esperanzada por la mejoría que Lázaro tuvo el fin de semana.
Si bien el nene de 13 años continúa internado en terapia intensiva, intubado, en los últimos días despertó y respondió a los estímulos de sus padres. "Lloramos un montón por su reacción", reconoció la mamá en diálogo con Telenoche a 15 días de la brutal agresión en la plaza Jerónimo del Barco.
"Estamos viendo el milagro en él, responde con movimientos de su cabeza a preguntas simples que le hacemos", destacó Mariela, quien comentó que Lázaro abrió un ojo, los empezó a ver y los reconoció.
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La mujer aclaró que el estado de su hijo sigue siendo delicado y permanecerá intubado, pero resaltó su evolución. "Lo bueno es que no retrocede, vamos avanzando a paso de hormiga pero avanzamos", afirmó.
Mariela valoró el trabajo del personal que asiste a Lázaro en el Hospital de Niños y explicó que una de las preocupaciones ahora es la fiebre que presenta de manera constante. "Es lo que nos estanca para seguir avanzando un poquito más con el tratamiento", agregó.
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El violento episodio del domingo 12 de noviembre es investigado por la Fiscalía Penal Juvenil de Segundo Turno, a cargo de Norma Scaglia, que tendría a 16 menores de edad como integrantes de la patota que agredió a Lázaro y a un amigo.
Un chico de 14 años está sospechado por tentativa de homicidio y las autoridades judiciales dispusieron que sea alojado en el Complejo Esperanza.