La extraña muerte de una joven de 23 años en Carlos Paz, el pasado 7 de agosto, parece esclarecerse. La autopsia determinó que Melisa Farías tragó una bolsa con droga, se descompensó y momentos más tarde murió por asfixia.
Los restos de cocaína, marihuana y trozos de plástico obstruyeron sus vías respiratorias. Según El Diario de Carlos Paz, se cree que ingirió la droga para burlar un control de la Policía Caminera ubicado en el peaje de la autopista Córdoba-Carlos Paz.
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Otra mujer dejó a Melisa en la puerta de la casa de su madre, quien al salir a la verla encontró convulsionando. La llevó inmediatamente al Hospital Municipal Sayago, pero su estado de salud era muy grave y llegó sin signos vitales.
Por el momento, el fiscal Gustavo Marchetti descarta la participación de terceros en la muerte. La joven tenía dos hijos.