Tres años después, la Justicia de Río Cuarto condenó a Agustín Camargo por abusar sexualmente a una joven a la salida de un boliche de esa ciudad. A pesar de la pena a seis años y medio de prisión que le dictó la Cámara Primera del Crimen, el joven de 25 años seguía en libertad hasta que el fallo quedara firme.
La jueza Natacha García le impuso este jueves una serie de condiciones, entre ellas una restricción de acercamiento a la víctima y su familia. Apenas un par de horas le bastaron para incumplir la perimetral y quedar definitivamente tras las rejas.
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Un hermano de Lucía, la joven que padeció el ataque sexual el 15 de marzo de 2019, fue quien advirtió la presencia de Camargo a metros de su casa en Banda Norte. Inmediatamente, dieron aviso a la Policía, lo redujeron y esposado lo trasladaron a la comisaría. Según denunciaron, estaba armado.
La abogada querellante, Rosa Sabena, expresó su preocupación y sostuvo que a partir de la violación a esta restricción no le quedará otro destino que la cárcel. La decisión quedará en manos de la Cámara que lo condenó horas antes.
El padre de la víctima, César, advirtió: "La idea de Camargo era matar a mi hija". En declaraciones a Telediario, el hombre señaló que el condenado increpó a su hijo que estaba con un amigo. Por este motivo, la abogada de la familia consideró que el joven cometió nuevos delitos, entre los que mencionó la tentativa de homicidio y portación ilegal de arma.
Agustín Camargo junto a sus abogados.
En el momento de la detención, Camargo estaba junto a su novia. Circulaba en un automóvil marca Peugeot cuando lo denunciaron y lo atraparon.