Un caso aberrante y con pocos precedentes en la provincia de Córdoba. Mariela Griselda Ríos (49) fue condenada a 15 años de cárcel por abuso sexual, corrupción de menores, exhibiciones obscenas y pornografía infantil: las víctimas fueron sus alumnitos de un jardín de infantes de la pequeña localidad de Viamonte.
Con la investigación quedó demostrado que, entre marzo y noviembre de 2018, la maestra desnudó, filmó, fotografió y hasta manoseó a niñas y niños de 5 años que estaban a su cargo.
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Ríos era docente suplente en ese centro educativo. Le enviaba las imágenes a su novio stripper que vivía en Mar del Plata y a quien los pequeños conocían como “Jordan”, ya que la mujer también los obligaba a que hablen por teléfono con él.
“El juego del chocolate”
Según quedó constatado en la causa, la maestra lograba corromper a sus alumnos mediante un engaño en el que, a cambio de que acepten sacarse la ropa y no contar nada en sus casas, ella les entregaba golosinas y chocolates.
Ríos los hacía bailar y ponerse en poses extrañas para luego registrar todo con su celular Motorola. Casi todos los lunes, miércoles y viernes durante ocho meses la docente suplente sometió a los niños en los días en que la directora no asistía a la institución.
Los hacía desnudarse en el baño, la dirección y hasta el patio. Además también hacía que niñas y niños le manden audios a su presunto novio “Jordan”, a quien ahora también la Justicia está buscando.
Golpe a la infancia: las pruebas clave
El sitio Puntal informó que los abusos sexuales salieron a la luz cuando una mamá se vio preocupada por el comportamiento de su hija, quien se defecaba encima y se negaba a ir al jardín en los días que sabía que se toparía con la maestra Ríos.
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Otra de las nenas se escondía debajo de la mesa cada vez que algún familiar quería tomarle una foto.
Por tal motivo los padres pusieron manos a la obra y comenzaron con la denuncia y la causa judicial. Desde la fiscalía de La Carlota se llevó adelante la investigación, donde en Cámara Gesell varios niños contaron las atrocidades que sufrieron.
De hecho, gracias los relatos que los alumnitos brindaron tanto a los expertos como a sus propios padres, se logró demostrar que la maestra en algunas ocasiones también se desnudaba para manosear a los varones.
La pena
El juez de Río Cuarto, Emilio Andruet, le aplicó la pena máxima que le cabía a Ríos por los delitos de los que se la acusaba.
Pese a las pruebas, la maestra negó todo hasta último momento y aseguró que siempre los fotografiaba con la ropa puesta con el objetivo de tener imágenes suyas para una celebración de fin de año. Sus últimas palabras las dijo por un monitor, frente al juez.
El juez Andruet y, en frente, Ríos en el monitor. / Foto: Puntal
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Más allá de la condena, desde la fiscalía solicitaron también que se investigue a la directora de la institución, para determinar si estuvo involucrada o fue cómplice de los abusos.
“Les arruinó la infancia”, lamentó el fiscal de Cámara Julio Rivero e hizo hincapié en que nadie puede asegurar que las imágenes de los niños no estén dando vueltas por la Deep Web.
Además de la condena a 15 años de prisión, la maestra Ríos deberá recibir tratamiento psicológico.