Un médico a domicilio recibió una condena de ocho años de prisión y una inhabilitación de 16 años para ejercer profesionalmente por haber abusado de modo gravemente ultrajante de dos pacientes mujeres en Córdoba.
Se trata de Guillermo Adrián Baigorrí, de 56 años, quien se encuentra detenido en la cárcel de Bouwer por peligrosidad procesal, aunque la sentencia no está firme. El fallo fue dictado por la jueza Graciela Inés Lucero, de la Cámara 2ª del Crimen, tras el pedido de la fiscal Laura Battistelli, según informó La Voz.
Los hechos por los que se condenó al acusado ocurrieron en 2012 y en 2015, cuando el profesional trabajaba en la empresa de emergencias Ecco. En primer lugar abusó de una joven de 22 años en su casa de la ciudad de Córdoba, mientras que la segunda víctima tenía 24 años y también vivía en la capital provincial.
Las víctimas padecieron los abusos en un marco de vulnerabilidad frente a un profesional médico al que habían depositado su confianza de pacientes. Además, sufrieron las consecuencias psicológicas del ataque sexual.
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Según la jueza interviniente, "el imputado no sólo que abusó de su profesión, sino que traicionó la confianza depositada por las víctimas que acudieron al auxilio médico. Por ello, los hechos son de gravedad, en virtud de la vulnerabilidad en que se encontraban ambas jóvenes y la relación de clara asimetría existente entre médico y paciente".
Por su parte, las dos mujeres repitieron en el juicio que habían notificado a la empresa de emergencias sobre los abusos, pero que la firma les dijo que tenían que hacer la denuncia correspondiente, según el mencionado medio.
En cuanto a las pericias psicólogas, coincidieron en el juicio que Baigorrí tenía “una personalidad compatible con el hecho que se le achaca”. Y se agregó: “Es un sujeto egocéntrico, narcisista, que acomoda la realidad externa en función de sus propios deseos y necesidades. Su personalidad tiene algunos rasgos de corte psicopático”.
También se probó que, después de haber abusado de una de las mujeres, asistió como cliente al supermercado donde ella trabajaba sabiendo que era la misma persona que había ido a revisar a su casa.
Con respecto a Baigorrí, trascendió que también trabajó en el servicio de emergencias Paravachasca de Calamuchita y en la Provincia en diferentes puestos, incluida la Fiscalización de Efectores.