Daniel Ernesto Agüero, cordobés de 44 años y padre de cuatro hijos menores de edad, fue condenado a 16 años de prisión por asesinar a un adolescente que se negó a convidarle un trago de su botella de cerveza.
El hecho ocurrió el 15 de septiembre de 2017 en Maipú al 350, barrio Centro. En horas de la noche, Agüero quiso ingresar a un kiosco, pero el dueño lo echó.
En la vereda estaba Nahuel Sancho, adolescente de 17 años, tomando una cerveza con amigos. Con agresividad, Agüero le pidió que le convide y, ante la negativa, quiso sacarle la botella.
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El joven se resistió, pero Agüero recogió un elemento metálico del suelo y lo apuñaló dos veces. Nahuel Sancho tenía contextura física pequeña y no pudo defenderse.
Fue internado y murió el 24 de octubre de 2017 en el Hospital de Urgencias, tras varios días de agonía. Las puñaladas le causaron una infección mortal.
En la Justicia, durante el debate, tanto el jurado popular como el tribunal decidieron por unanimidad caratular la causa como Homicidio simple. Por ello, Daniel Ernesto Agüero recibió la pena de 16 años de cárcel, que fue más alta de lo que en principio se esperaba.
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La decisión se tomó porque el mismo agresor admitió que era cocainómano y se drogaba cada vez que podía, según confirmó el fiscal Marcelo Hidalgo a ElDoce.tv.
Además, cuando un efectivo policial fue a detenerlo, Agüero lo agredió con golpes hasta que el oficial pudo reducirlo. Según se indicó en la causa, el condenado trabajaba vendiendo bolsas de residuo.