El geriátrico Santa Lucía de Saldán quedó clausurado a raíz del brote de coronavirus detectado a principios de abril. Los residentes fueron trasladados a diferentes centros de salud. Hasta el momento, ocho adultos mayores fallecieron.
Por esto, el fiscal Andrés Godoy de la Unidad Fiscal de Emergencia Sanitaria (UFES) imputó al médico Lucas Figueroa por considerarlo responsable de la "propagación de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas", delitos previstos en los artículos 45 y 202 del Código Penal.
+ MIRÁ MÁS: La carta abierta del médico de Saldán: “Me siento absolutamente discriminado”
También imputó al director médico de la residencia, Marcelo Santiago Lazaro, por considerar que habría incurrido en la comisión del delito de “propagación culposa de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas”, agravada por el resultado de enfermedad y muerte, en calidad de autor.
Figueroa, también doctor de cabecera del PAMI en la localidad de Saldán, dio positivo de coronavirus el pasado 10 de abril. Él mismo pidió hacerse el test a pesar de ser asintomático, ya que sufría "asma crónica". Luego de conocerse ese resultado, su familia fue sometida a hisopados y los cinco integrantes resultaron infectados.
En la Servilleta del Viernes de Arriba Córdoba, el periodista Roberto Battaglino detalló que el propietario del geriátrico, Rafael López Peña, padre del vocal del Tribunal Superior de Justicia, elogió la investigación del fiscal Godoy: “Yo estimo que el fiscal va a desestimar la denuncia”.
Luego de exponer esta información, el el Ministerio Público Fiscal comunicó que se resolvieron las imputaciones de Marcelo Lazardo y Lucas Figueroa. Video: