A tres semanas del crimen de Gabriela Pérez (24) en un encuentro sindical el asesino sigue suelto. Está filmado que un hombre disparó hacia el salón del Club Yapeyú donde la víctima participaba de un almuerzo del Soelsac, el gremio de trabajadores de la limpieza.
Para los investigadores, el ataque del 9 de septiembre lo perpetró un sicario y sostienen que hay más responsables detrás del plan, sin embargo hasta el momento no hay ningún detenido.
Este viernes la familia de Gabriela realizó una marcha desde Plaza España hasta la puerta de Soelsac, en la calle Entre Ríos al 300. Exigieron justicia, además denunciaron que desde el día del crimen reciben amenazas.
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"No damos más", expresó Liliana, la mamá de la joven asesinada. Y manifestó: "Es una agonía cada hora, cada noche, cada minuto. No tenemos vida propia, desde que me arrebataron a mi hija no tenemos vida propia".
La mujer dijo que quiere justicia para tratar de encontrar algo de tranquilidad. Reconoció que tienen temor de dar información sobre la causa. "Nuestra vida corre peligro, sólo decimos que son unos salvajes", alertó.
Sobre Gabriela, destacó: "Ella no andaba robando, no vendía droga, laburaba, se levantaba a las 6 de la mañana y a veces se iba caminando a su trabajo por una miseria de plata para poder mantener a su marido y a su hija".
Con marcado hermetismo, la investigación del caso está en manos de la fiscal Silvana Fernández. A la vez, otros dos fiscales, Patricia García Ramírez y Guillermo González, se sumaron para investigar una fuerte disputa gremial que involucra al titular de Soelsac, Sergio Fittipaldi, y a Franco Saillén, referente del Surrabc que busca quedarse con la conducción del sindicato de la limpieza.