Analizando patrones de sueño a nivel global mediante cálculos matemáticos y estadísticos, los científicos lograron confirmar cinco condicionantes que influyen sobre el sueño. El estudio fue reconocido y publicado en la prestigiosa revista Science Advances.
"La sociedad nos empuja a quedarnos despiertos hasta tarde, pero nuestros relojes corporales tratan de que nos levantemos más temprano y, entretanto, nuestras horas de descanso están siendo sacrificadas", comentó a la BBC Daniel Forger, líder de la investigación.
Repasamos los factores:
1) PRESIÓN SOCIAL: el estrés del día a día altera los ritmos de sueño. "Aunque nuestros relojes corporales están programados para hacer ciertas cosas, nosotros no podemos hacer lo mismo porque estamos gobernados por circunstancias sociales", describió Forger.
2) HORARIO: mientras más tarde se acueste la gente de un país, menos dormirá en promedio. "Yo me preocuparía menos sobre la alarma del despertador y más sobre lo que hace la gente por la noche: ¿cenan a las 10 de la noche?", describió Forger. La recomendación es irse a la cama más temprano en lugar de levantarse tarde.
"La sociedad nos empuja a quedarnos despiertos hasta tarde, pero nuestros relojes corporales tratan de que nos levantemos más temprano".
3) SEXO: en promedio, las mujeres duermen 30 minutos más que los hombres. Se acuestan antes y se despiertan después. El motivo es polémico: aseguran que usan más el cerebro que los hombres .
4) EDAD: tiene un efecto importante en el descanso. Los menores de 30 años alternan los horarios para dormir con frecuencia, mientras que los mayores los respetan de manera más estricta. La gente de mediana edad es la que menos duerme.
5) LUZ: las personas que pasan más tiempo con luz solar se duermen más temprano que las que están todo el día bajo luz artificial.