El principal sospechoso del asesinato de la activa militante por los Derechos Humanos y testigo clave de una causa por lesa humanidad en Mendoza, quedó detenido esta mañana. Fue durante un fuerte operativo policial realizado en el barrio Estación Flores, al sur de la capital cordobesa.
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El hombre tiene unos 40 años de edad. Estaba en una vivienda, donde no ofreció resistencia. No se conoce por ahora la relación que tenía con la víctima, pero los investigadores encontraron pruebas importantes. “Hay elementos interesantes para que investigue la fiscal de la causa. Encontramos indumentaria, prendas de vestir y un vehículo”, dijo el jefe de Homicidios, Alejandro Mercado.
Por ahora, el detenido quedó imputado por “homicidio calificado” y rige el secreto de sumario. El caso está en manos de la fiscal Claudia Palacios que avanza en otras hipótesis, mientras el móvil del robo parece estar descartado.
