A casi un año de la muerte de Luciano Aranda, el nene de 14 años electrocutado en una plaza de la ciudad de Córdoba, y cuya familia exigiera avances a la Justicia, los municipales acusados de homicidio culposo sufrieron un duro revés.
La Cámara de Acusación rechazó los recursos interpuestos por los cuatro imputados que cumplían funciones en el Departamento de Mantenimiento de la Subdirección de Alumbrado Público de la Municipalidad de Córdoba.
Lo confirmó Carlos Nayi, abogado del papá Vladimir Aranda, en diálogo con ElDoce.tv. Ahora resta el sorteo para conocer en qué Camara del Crimen será el juicio y su fecha exacta.
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Los acusados son dos jefes y dos empleados de la cuadrilla. Se trata de Ramón Cuello, Marcos Farioli, Hugo Chocobares y Julio Sebastián Banegas. El fiscal de instrucción, Guillermo González, los imputó por homicidio culposo, delito que prevé una pena de cinco años de prisión e inhabilitación.
Nayi remarcó que con esta resolución queda “demolida la hipótesis que trataron de instalar los acusados de que la tragedia ocurrió porque el poste estaba vandalizado”.
También reveló que el papá de la víctima ya recibió la noticia: “Está emocionado, aunque nada para alegrarse. Pero significa una bocanada de aire fresco”.
La tragedia
Eran alrededor de las 20 del 25 de enero de 2022. Un grupo de diez chicos de entre 12 y 14 años se encontraban jugando en la plaza, ubicada sobre Achával Rodríguez al 1900, en barrio Alto Alberdi. Pero en cuestión de segundos pasaron de la risa al llanto: fueron testigos de una tragedia.
Luciano Aranda recibió una descarga eléctrica desde un poste de alumbrado público. Murió al instante. Pese a que vecinos intentaron reanimarlo y personal del servicio de emergencia del 107 le practicó los primeros auxilios, ya no hubo caso.
Juan Martínez, papá de una chica de 14 años que se encontraba jugando con ellos, fue testigo de la tragedia. En diálogo con Arriba Córdoba había asegurado: “Fue de terror lo que hemos vivido”.